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jueves, 29 de junio de 2017

Gastroenteritis y diarreas en el verano

Empieza el buen tiempo y todos tan contentos. Las tan ansiadas vacaciones parece que se acercan, que finalmente llegan y planificamos donde vamos a ir, bien a la montaña, playa o al pueblo de los abuelos.
Pero con el verano aumentan ciertos problemas de salud como son las gastroenteritis, o la diarreas. Estos procesos son benignos y autolimitados, es decir, que en principio no son una enfermedad grave y su evolución es la de la curación en unos pocos días. Y aunque así sea, aunque a los pocos días nos vamos a curar, podemos ayudar a nuestro organismo en el proceso de curación y a encontrarnos mejor. La mayoría de las veces, no sabemos las causas pero suelen ser pequeñas toxiinfecciones alimentarias, por la ingesta de algún alimento mal conservado.

En mi experiencia clínica, he podido observar como existe confusión con la pauta alimentaria a seguir en estos procesos y eso es lo que quiero aclarar en este post. La población confunde entre dieta astringente y dieta blanda. Por ejemplo; suele tomar arroz hervido cuando hay vómitos, lo cual luego puede generar un cuadro de estreñimiento.

En aquellas situaciones que tengamos diarrea siempre realizaremos la Dieta Astringente. Lo que pretende no es más que de una forma sencilla y natural limitar esa diarrea. Será muy importante realizar una correcta hidratación. También en este caso es muy útil la suplementación con probióticos. Mi consejo es que siempre los tengamos a mano. Incluso esta suplementación de probióticos lo podremos usar previo a los viajes o con la toma de antibióticos, bueno este será otro tema a tratar otro día.

En aquellas situaciones que el proceso cursa con dolor abdominal principalmente lo que es en la boca del estómago, o con vómitos, la pauta de alimentación que decidiremos es la Dieta Blanda. Su objetivo es la ingesta de alimentos que sea fácilmente digeribles y que así el estómago y el resto del aparato digestivo no trabaje mucho. En los casos de vómitos, en muchas ocasiones es interesante no tomar alimentos sólidos durante 2-3 horas o incluso hasta tolerar bien los líquidos.

Tengo que reseñar de alguna manera que ante alguna de estas situaciones tenemos que tener especial atención en los niños, embarazadas y ancianos ya que son una población especial y con riesgo de deshidratación con algunas de estas situaciones.

No recomiendo tomar medicamentos para cortar ambos procesos, salvo en situaciones muy concretas.

Una vez solucionado el proceso, hay que incorporar la alimentación habitual de forma paulatina.

lunes, 13 de febrero de 2017

Metales pesados

Hablamos de metales pesados o metales tóxicos, de aquellas sustancias que penetran en nuestro organismo a través de los alimentos, bebidas, del aire, la ropa, cosméticos,… y que son perjudiciales. Una vez que están en nuestro organismo, estos metales pesados, se acumulan en algunos órganos (huesos, hígado, sistema nervioso,…) y en los tejidos (adiposo) y como consecuencia aparece unos efectos perjudiciales.

Existen otro metales que no son tóxicos, como el calcio, y que cuando estos metales no tóxicos presentan un desequilibrio, los metales pesados sustituyen a los anteriores modificando las reacciones enzimáticas, bioquímicas y hormonales. Esto conlleva a una disfunción fisiológica con la aparición de una vasta gama de síntomas que no siempre son fáciles de interpretar.

Los principales metales pesados (tóxicos) son: 

  • Plomo: anorexia, ataxia, irritabilidad, hiperactividad, alt. de memoria, convulsiones epilépticas, cefaleas, dolores musculares,…
  • Mercurio: pérdida de apetito y peso, temblores, insensibilidad al dolor, irritación de la piel, migrañas, alteración en la reproducción,…
  • Aluminio: astenia, demencia senil, cólicos abdominales, nauseas,…
  • Cadmio: hiperactividad infantil, cefalea, glaucoma, hipertensión, dolor articular,…
  • Arsénico: anorexia, astenia, depresión, hematuria, rinitis persistente, hiperqueratosis, dermatitis, vitíligo,…
  • Níquel: carcinoma de útero, cáncer de pulmón, cáncer de senos nasales, dermatitis, asma, lesiones vasculares cerebrales,…
  • Bario: salivación, nauseas, vómitos, diarrea, vértigo, bradicardia, hipokaliemia,…
  • Uranio: mal estar generalizado, fiebre, púrpura, inmunodepresión, leucemia,…

Estos son los que producen efectos tóxicos sobre el organismo aún en bajas concentraciones, alguno de ellos tienen efectos cancerígenos. Los metales pesados son considerados de las sustancias más peligrosas para nuestra salud.

Los metales pesados tienen otros metales no tóxicos con acción antagonista, con lo que es importante analizar y tener en consideración también a estos otros. 

¿Cómo debe tratarse un aumento de los niveles de metales pesados?

Podremos obtener valores de metales pesados en sangre y orina, pero se hace imprescindible el estudio de los niveles de estos metales a nivel intracelular, para ello recomendamos realizar un estudio del bulbo capilar mediante una técnica denominada microscopía cromática con espectrometría. Cuando se identifican metales pesados elevados, debemos actuar en cuatro niveles:

· Reequilibrio de relaciones minerales fundamentales para aumentar la energía.
· Uso de minerales antagonistas.
· Uso de agentes quelantes.
· Fortalecimiento de los órganos de eliminación.

sábado, 11 de febrero de 2017

Sueño, deporte y salud

Series, tiradas largas, suplemento de proteínas, vitaminas, aminoácidos ramificados, cuestas abdominales,… todo forma parte de nuestro entrenamiento de forma consciente, pero el descanso es el tercer pilar sobre el que se va a sustentar nuestro rendimiento en la carrera y no solo es referido al día de descanso, si no al descanso diario, al tiempo que le dedicamos a dormir.

El insomnio es un problema de salud, que en muchas ocasiones consideramos un problema banal, cuando en realidad tiene gran importancia sobre nuestra salud y sobre nuestro rendimiento deportivo. Conforme a los datos de la última encuesta de INFITO (Centro de investigación sobre fitoterapia) sobre un total de 10.526 pacientes, 4 de cada 10 españoles tienen problemas para conciliar el sueño.

Todos nosotros en algún momento de nuestra vida hemos sufrido algún episodio de insomnio. Entre los factores que pueden desencadenar el insomnio destacan situaciones de ansiedad, como la preocupación laboral, el paro…(de actualidad hoy en día) así como problemas sentimentales, problemas económicos. Hoy día sabemos que de las personas que sufren insomnio en algún memento, entre el 10-12% se convierte en un problema crónico. Se estima que el 90% de las personas que presentan insomnio no reciben tratamiento adecuado.

¿Qué es el sueño? 
El sueño es una parte integral de la vida cotidiana; una necesidad biológica que permite reestablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales para un pleno rendimiento diario. Los seres humanos dedicamos a dormir entre un tercio y un cuarto de nuestra vida.

Cada noche, mientras dormimos, pasamos por diferentes estadios de sueño que se suceden con un patrón repetido de cuatro a seis ciclos a lo largo de toda la noche. Dependiendo del grado de actividad muscular, cerebral y movimientos oculares, podemos dividir el sueño en dos fases o dos tipos de sueño.

        1. Sueño No-Rem: en esta fase, las ondas cerebrales recogidas mediante electroencefalograma, son de alta frecuencia y baja amplitud (vigilia)que progresivamente se van transformando en ondas cada vez de menor frecuencia y mayor amplitud. El tono muscular va disminuyendo, dejando nuestro cuerpo cada vez más relajado, al igual que el ritmo respiratorio y cardiaco. Los movimientos oculares desaparecen por completo. Este sueño No-Rem, tiene cuatro fases de la I a la IV, con una duración aproximada de 90 minutos y en el que según pasa de fase, va profundizando en el sueño.

       2. Sueño Rem (Rapad Eye Movement): aparece a los 90 minutos de quedarnos dormidos. La actividad cerebral es rápida y de baja amplitud. Una característica del sueño Rem es la pérdida de tono muscular, protegiéndonos así de lesionarnos o tener accidentes derivados de mover nuestro cuerpo en respuesta a los sueños. Por ultimo existe un movimiento rápido de los ojos. A lo largo de la noche este tipo de sueño se va alternando con las cuatro fases del sueño Rem. La fase No-Rem, predomina en la segunda mitad de la noche.

Importancia del sueño

Podríamos decir simplemente que dormimos para poder estar despiertos y por estar despiertos, poder estar activos. Pero el sueño es una necesidad básica de nuestro organismo. Todavía queda mucho por investigar y por descubrir en el sueño, pero por los datos que tenemos parece que el sueño No-Rem se relaciona con la reparación de los tejidos corporales, así como la conservación y reparación de energía. La fase Rem se relaciona con procesos cerebrales. 

Hoy en día sabemos que la falta de sueño puede desencadenar problemas de salud tan relevantes como problemas cardiovasculares (mayor incidencia de hipertensión arterial), trastornos psquiátricos (alteraciones del estado de ánimo, dificultades para la concentración), problemas inmunológicos, alteraciones hormonales, disminución de los reflejos (riesgo de accidentes de tráfico,…) incluso en situaciones severas, alucinaciones, ataques epilépticos,…

¿Cómo podemos solucionarlo?

En primer lugar con unas medidas básicas para cuando llegue el momento de ir a descansar (pincha aquí).

La utilización de fármacos en ocasiones son necesarios. Los deportistas de élite y los aficionados, ante la llevada de una prueba, de un evento para el que se han estado preparando pueden generarles una situación transitoria de estrés, de ansiedad que les dificulte el sueño. Habitualmente se utilizan fármacos con son realmente tranquilizantes con un pequeño efecto somnífero como son las benzodiazepinas (orfidal, lexatín). Pero más que describir las indicaciones de estos fármacos, voy a enumerar los efectos secundarios que presenta, al menos los posiblemente relacionados con el rendimiento deportivo. Los posibles efectos secundarios son: 

     - Sistema nervioso: frecuentemente sedación diurna, especialmente en la primera semana. Puede producir amnesia anterógrada varias horas después de tomar el medicamento. También confusión y ataxia (movimientos descordinados), mareos, cefalea, depresión, desorientación, temblor. Ocasionalmente trastornos del comportamiento y excitación paradójica.
    - Digestivos: náuseas, vómitos, cambios en el hábito intestinal, alteraciones en la salivación, epigastralgia. Raramente ictericia, hepatitis.
    - Otros: cambios en la libido, incontinencia o retención urinaria, dermatitis, urticaria, prurito, alteraciones hematológicas, diplopía, nistagmo, alteraciones auditivas. Raramente depresión respiratoria, hipotensión, arritmias cardiacas.

Por otro lado, tenemos la posibilidad de presentar otros efectos como: tolerancia (después del uso continuado durante semanas puede detectarse cierta pérdida del efecto, por lo que se suele aumentar la dosis) y el síndrome de retirada (el tratamiento continuado puede provocar dependencia física y psíquica. Su interrupción brusca puede provocar un síndrome de retirada con insomnio o ansiedad de rebote, cambios de humor e intranquilidad. Se recomienda disminuir la dosis de forma gradual)

Pero existen más posibilidades y muy interesantes por su eficacia y seguridad como son las plantas medicinales, de las cuales destacamos las siguientes:

    · Amapola de California: planta medicinal utilizada habitualmente como analgésica y sedante. También se emplea en los dolores de cabeza. No usar si se está embarazada o en la lactancia.
  · Pasiflora: está indicada en casos de insomnio, ansiedad, nerviosismo, taquicardia, irritabilidad, palpitaciones, alteraciones del sueño…en los estudios se ha observado que en tratamiento con esta planta predomina el sueño Rem.
   · Valeriana: según la OMS la indicación de esta planta medicinal radica en casos de irritabilidad, excitabilidad nerviosa.
   · Otras plantas menos usadas son: amapola, espino blanco, lavanda (especialmente indicada si hay dolores de cabeza), lúpulo, melisa, mejorama, verbena y la tila.

Todas estas plantas las podemos encontrar en la farmacia, pidiendo consejo al farmacéutico, pero será el médico el que nos pueda prescribir la planta medicinal más adecuada.

Otros suplementos que nos pueden ayudar a mejorar la calidad del sueño como son L-Triptófano, que es un aminoácido esencial en la fisiología del sueño y el Magnesio como oligoelemento.

lunes, 19 de diciembre de 2016

¿Cómo se deben tomar los medicamentos homeopáticos?

Las personas que entran en contacto por primera vez con la homeopatía suelen preguntarse cómo se toman los medicamentos homeopáticos. Esto suele ser así porque la forma farmacéutica más común de éstos son los gránulos y los glóbulos, sin embargo su ingesta es muy sencilla porque se disuelven directamente en la boca y sin necesidad siquiera de agua.

En cuanto la dosis a tomar sí hay cierta diferencia respecto a los medicamentos convencionales, pues en la homeopatía la edad y el peso de la persona no influyen a la hora de la administración. La dosificación de los gránulos de tubos es normalmente de 5 gránulos, entre tres y cinco veces al día. La dosis de los glóbulos es de una toma única, ya que se presentan en envases unidosis. Además, es recomendable tomarlos al menos un cuarto de hora antes o después de las comidas para una mejor absorción del medicamento. 

Si no los tocamos con los dedos mucho mejor, sobre todo, por cuestiones de higiene, pero esta es una recomendación que se ha de aplicar a cualquier tipo de fármaco. Algunos de los medicamentos homeopáticos se presentan con un cuenta-gránulos que facilita la ingesta.

Si se padece una patología aguda como por un ejemplo una gripe, lo ideal es empezar el tratamiento en cuanto aparecen los primeros síntomas. Primero deberemos tomarlos varias veces al día y después espaciando las toma según se vaya notando mejoría.

En las patologías crónicas, el medicamento se toma con regularidad una vez al día, una vez a la semana o una vez al mes, según corresponda. Nuestro médico nos indicará la pauta.

Los medicamentos homeopáticos se pueden tomar como tratamiento único o también compatibilizarse con otros fármacos, ya que en líneas generales no presentan interacciones. 

Por último, recordar que los medicamentos homeopáticos al ser fármacos son de venta exclusiva en farmacias.

martes, 22 de noviembre de 2016

¿Qué papel tiene la homeopatía en las enfermedades agudas y crónicas?

La homeopatía tiene aplicación en numerosas patologías, bien como tratamiento exclusivo o como complementario a otros tratamientos. De hecho, alrededor de la mitad de los conocedores de esta terapia afirma que ésta es útil para el abordaje de cualquier enfermedad.

Según un estudio reciente el 61% de los encuestados identifica la homeopatía con un método terapéutico para prevenir y/o aliviar enfermedades tanto agudas como crónicas, a veces individualizando el tratamiento. 

Lo cierto es que la mayoría de los usuarios de la homeopatía la emplean para tratar patologías víricas como gripes y resfriados, la ansiedad o el estrés, y en ocasiones también para aumentar sus defensas. 

Los pacientes crónicos pueden verse afectados a lo largo de su enfermedad por estas patologías menores como resfriados, gripes, trastornos digestivos, etc., que al final alteran su equilibrio y que afectan aún más a su calidad de vida. , 

El objetivo de la homeopatía es ir más allá del alivio de los síntomas que van apareciendo, se busca ayudar al paciente a restablecer globalmente su equilibrio natural. En las enfermedades crónicas este abordaje resulta crucial para que el paciente reciba el tratamiento más adecuado. 

Los medicamentos homeopáticos son compatibles con otros tratamientos y esto hace que muchos médicos formados en homeopatía la incorporen, ya que trata estas afecciones reduciendo la intensidad y la frecuencia de las mismas.

Otra de las ventajas a favor de la homeopatía y su aplicación en las enfermedades crónicas es que sus medicamentos no tienen efectos secundarios y no presentan interacciones, algo muy valorado en el caso de pacientes polimedicados.

El profesional de la salud debe tratar a cada paciente de forma individualizada y siempre valorando la situación personal, algo que la homeopatía considera desde el primer momento y tiene presente a lo largo del tratamiento,

En el momento actual, el interés de la sociedad por la homeopatía es una realidad, de hecho algunos estudios apuntan a que el 67% de la personas, hayan recurrido o no a esta terapéutica, muestran una actitud abierta y positiva para recibir más información sobre medicamentos homeopáticos. 

Además, también se ha podido averiguar que la gente que recurre a la homeopatía tiene un alto grado de confianza en ella: “Ocho de cada diez consumidores de medicamentos homeopáticos se muestran satisfechos o muy satisfechos con los resultados obtenidos, y el 87% recomendaría homeopatía a sus familiares y amigos”.

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